LA NIEVE Y LOS ESTADOS DEL AGUA

¡Comenzamos el año con un frío que pelaba! Hacía tanto frío que nos sorprendió una gran nevada. Esto se debió a una borrasca llamada Filomena que trajo consigo las bajas temperaturas y la humedad que hicieron posible que pudiéramos ver nuestro pueblo así de bonito:
📷 Ángeles Monge
¡Y jugar con la nieve y hacer muñecos!
   
¡Qué divertida es la nieve, verdad Olaf!
              
Pero... ¿qué es la nieve?
Nieve es el nombre que recibe el agua congelada que debido al frío pasa a su estado sólido. 
¿Y qué es eso de los estados del agua? 
¡Vamos a descubrirlo a través de la experimentación y la observación!
La primera observación  sobre la nieve la hicimos cada uno directamente con nuestra experiencia los días pasados. Ahora... si lo que queremos demostrar es que la nieve es agua congelada debemos observar cómo es el agua. Para ello, repartimos en vasos de plástico agua de una garrafa, escribimos nuestro número para identificar los vasos y que no hubiera equívocos y nos dispusimos a analizarla con los cinco sentidos.
Descubrimos que el agua no tiene ni olor, ni sabor, ni color...
Y que además, el agua en estado líquido adoptaba la forma del recipiente en el que se encontraba pero nosotros no podíamos ni agarrarla ni mantenerla en nuestras manos.

El siguiente paso fue descubrir si es verdad eso 
de los estados del agua
Ver antes este interesante vídeo nos ayudó a situarnos, entenderlo un poco mejor y conocer qué es el ciclo del agua:
¡Estamos listos! 
Para pasar el agua de su estado líquido al sólido necesitamos mucho frío y en el cole lo encontramos en la nevera de la "Sala de profesores" así es que decidimos lavarnos bien las manos antes de entrar y al salir de allí, desinfectar todo muy bien y meter en el congelador cubiteras con agua durante unas horas.
Una vez allí, antes de comenzar, comparamos la sensación térmica del radiador y la del congelador para percibir las diferencias entre caliente y frío:
Después, vertimos el agua en las cubiteras y las metimos en el congelador
¡Nos volvemos a clase!
 ¡Ahora sólo queda esperar!
Transcurrido un tiempo, fuimos a comprobar qué había pasado
 y analizamos las cubiteras en clase.
¡El agua había cambiado de estado! En su estado sólido podíamos cogerlas y manipularlas aunque pronto, al no hacer tanto frío, comenzaron a descongelarse y regresaban a su estado líquido, de una manera aún mucho más rápida si las  poníamos cerca del tubo de la calefacción.
A Sofía le gustó tanto este sencillo experimento que lo repitió en casa y nos trajo orgullosa sus cubitos de hielo ¡Bien preciosa!
Otro día, probamos a meter cubitos de silicona con forma de frutas, pasaron de ser blanditos a rígidos y de poder apreciar el agua dentro de ellos a notar un bloque de hielo dentro.
¡Vamos bien! Hemos llegado al momento de convertir
el agua de su estado líquido a su estado gaseoso. 
Según nos contaban en el vídeo necesitamos algo que simule el calor del sol, así es que trajimos a clase un hervidor de agua para calentarla y un espejo que tal y como pasa con las nubes se iría llenando de gotitas de agua. 
                
¡ALUCINANTE ACABAMOS DE DEMOSTRAR CÓMO ES EL CICLO DEL AGUA Y SUS TRES ESTADOS!
 Otra forma de observar que con el calor el agua se evapora y desaparece de la superficie lentamente fue dejando una cubitera con agua sobre el radiador e ir asomándonos a lo largo de la jornada para comprobar el nivel del agua ¡Hasta que desapareció por completo!
Sólo nos queda plasmar lo aprendido en una ficha a modo de recogida de datos y contar en casa todo lo que hemos descubierto.

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